Reseña del libro Ética para Celia. Contra la doble verdad

 

«Ética para Celia. Contra la doble verdad»

¿Quién es Ana de Miguel?

Ana de Miguel Álvarez, autora del libro Ética para Celia. Contra la doble verdad (2021), es filósofa española y nació en Santander en 1961. Es profesora titular de Filosofía Moral y Política en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid desde el año 2005. Estudió Filosofía en la Universidad de Salamanca y se doctoró en la Universidad Autónoma de Madrid. Realizó su tesina sobre Marxismo y feminismo en Alexandra Kollontai y su tesis doctoral se titula «Élites y participación política en la obra de John Stuart Mill».

Su contribución filosófica está vinculada a la teoría feminista y es especialista en este ámbito teórico. Ha sido miembro del Seminario Feminismo e Ilustración creado por la filósofa Celia Amorós. Así también, ha sido directora del Máster de Estudios interdisciplinares de Género de Madrid. Ana de Miguel ha aplicado a gran parte de su contribución filosófica a la teoría feminista. Su trabajo académico es a su vez un compromiso práctico dirigido a fines sociales de la emancipación de la mujer:

«La teoría feminista sin los movimientos sociales es vacía; los movimientos sociales sin teoría crítica feminista son ciegos»[1]

Actualmente, sus preocupaciones filosóficas giran en torno al movimiento feminista actual y en la construcción de nuevos marcos teóricos de la interpretación de la realidad. Sus últimas obras y publicaciones investigan la reproducción de la desigualdad sexual en las sociedades formalmente igualitarias. En concreto, ha abordado críticamente la violencia de género, la violencia sexual en la pornografía y denomina la prostitución como «escuela de desigualdad humana». Es feminista en la teoría y práctica y se posiciona como feminista abolicionista.

Es una filósofa con un gran bagaje cultural y producción filosófica, algunas de sus obras son: Cómo leer a John Stuart Mill (1994), Alejandra Kollontai (2001), Celia Amorós y Ana de Miguel (eds.) Teoría feminista. De la Ilustración a la globalización (3 vol) (2005), Neoliberalismo sexual. El mito de la libre elección (2015) y Ética para Celia. Contra la doble verdad (2021).

Así también, ha sido galardonada con numerosos premios por su producción teórica y su compromiso social. Algunos de sus numerosos premios son: Comadre de Oro otorgado por la Tertulia Feminista les Comadres en 2016, Accésit al XXIII Premio de Divulgación Feminista Carmen de Burgos por el artículo 'La prostitución de mujeres, el harén democrático', publicado en 'El Huffington Post' el 20 de enero de 2015 y Categoría Nacional de los Premios Mujeres Progresistas en el año 2017

¿De qué trata el libro?

La tesis principal del libro Ética para Celia. Contra la doble verdad es que en la sociedad existe una doble moral para hombres y para mujeres, totalmente polarizada. Ana de Miguel sostiene que esta doble moral se ha construido en las sociedades patriarcales durante siglos consolidando una doble verdad diferente para cada género a partir de la cual se construyen su proyecto vital. Esta doble moral es a su vez una doble verdad que configura los comportamientos, fines, expectativas y límites del sentido de la vida de los seres humanos. Fundamentalmente, la ética trata de cómo vivir una vida buena y está encaminada a orientar la tarea de dar sentido a una vida entra en relación con los demás puesto que vivimos en sociedad. Esta relación, señala la autora, durante siglos ha estado fundada en la desigualdad de género. En esta obra, Ana de Miguel muestra que esta doble verdad tiene consecuencias sociales de desigualdad en la consecución de una vida buena. El valor de la empatía en esta obra será fundamental para solventar las consecuencias sociales negativas y llevar a cabo una vida buena universal.

Ana de Miguel toma como recurso la ética para denunciar la reproducción de desigualdad de género en las sociedades actuales las cuales denomina sociedades formalmente igualitarias. Es decir, sociedades en las que los derechos formales proclaman la igualdad entre hombres y mujeres y, sin embargo, en estas sociedades siguen existiendo formas de reproducción de desigualdad de género y violencia sexual.

La obra está divida en dos partes en las que procede a partir de explicaciones, revisión de conceptos y teorías, análisis, reflexión, denuncia social, reivindicación y soluciones prácticas dirigidas a la consecución de una vida universal buena y plena con el fin de lograr una sociedad igualitaria.

En la primera parte de su libro, «De la ontología y por qué es el núcleo duro de las creencias y las contradicciones que vives», examina los discursos y relatos que han construido y establecido una ontología articulada para hombre y otra diferente para mujeres: lo que es cierto y configura la concepción de la realidad y de la vida para una chica no lo es para un chico y viceversa. La ontología en la disciplina filosófica es la parte que estudia el ser en cuanto que es y es núcleo de nuestras creencias y límites de nuestra vida. Ana de Miguel muestra cómo estas creencias y relatos que provienen de la ontología se han construido a partir de un relato fundado en la desigualdad de género. Estos relatos se han consolidado en la cultura, es decir, en la estructura simbólica de nuestra sociedad durante siglos y muchos de los prejuicios y creencias actuales sobre lo que es ser hombre y ser mujer (y, en consecuencia, lo que puede hacer un hombre y una mujer con su vida y sus límites) impregna en el imaginario colectivo hasta el punto de pensar que nuestras concepciones de hombre y de mujer son «naturales» cuando en realidad son «culturales».

Ahora bien, en el análisis de esta primera parte, Ana de Miguel recorre los mitos y creencias de la cultura occidental sobre las concepciones de género de masculinidad y feminidad que hunden sus raíces en la mitología griega. Seguirá este análisis examinando los mitos que envuelve la religión occidental judeo-cristiana sobre la feminidad y masculinidad y finalizará su análisis y reflexión en la Historia de Filosofía. Como nos recuerda Ana de Miguel, además de que la Historia de la Filosofía es androcéntrica, es decir, la visión del mundo que identifica lo masculino con lo universal, los filósofos en sus ensayos y numerosas obras creado numerosos relatos que han configurado el significado cultural de ser mujer y han consagrado condición la femenina a un estado de subordinación, despojándola del concepto universal de ser humano (Aristóteles, Rousseau, Nietzsche, entre otros).

«Esto es lo importante de conocer el pasado y las creencias que se han ido forjando durante miles de años. Podemos comprender mejor la línea que una la dichosa escalera patriarcal, las viejas y las nuevas esclavitudes»[2]

En la segunda parte de su obra, «De las condiciones buenas de la vida», aborda las contradicciones prácticas que se dan en esta doble ontología contradictoria y sus consecuencias en la esfera privada y pública en la masculinidad y en la feminidad. Analiza diferentes factores culturales que han cambiado la condición femenina a lo largo del tiempo y han acelerado su autonomía como ser humano. Por ejemplo, el acceso de la mujer a la educación y al trabajo han posibilitado la realización de una vida buena, pero no de forma plena ni igualitaria. No obstante, a pesar de haber logrado autonomía Ana de Miguel analiza diversos factores culturales que están atravesados por la socialización de género reproduciendo desigualdades: la sexualidad, el amor en pareja y una revisión crítica de las concepciones del amor actuales, los roles de género en los cánones de belleza, los medios de comunicación, etc., y hasta qué punto determinan nuestra vida. Así también analiza problemas actuales y cómo han repercutido en la consecución de una vida buena: la pandemia y sus consecuencias sociales, el discurso de la felicidad y el pensamiento positivo como estrategia de mercado y la sociedad de consumo. Son numerosos los temas de actualidad que analiza para comprender nuestra realidad de forma crítica y orientar correctamente nuestras vidas hacia una vida plena fundada en la empatía en relación con los demás y en la racionalidad que ilumine la visión miope de la realidad.

En definitiva, Ana de Miguel nos muestra cómo la filosofía y la ética ha construido una doble verdad sobre el sentido de la vida y los límites que debemos imponer, han legitimado e instaurado un orden polarizado de la vida; unas normas para los hombres y otras para las mujeres. La finalidad de esta obra es desvelar la doble verdad y así poder poner en práctica comportamientos que nos lleven a la universalidad de la comunidad humana.

«Hoy, como ayer, el pensamiento crítico es totalmente necesario. El caso es valorar si este punto de partida, la existencia de las mujeres y nuestras experiencias y perspectivas como las otras tienen valor filosófico y cuál es […] Estamos hablando de la necesidad de un nuevo punto de partida, ahora que sabemos mejor quiénes somos y de dónde venimos. De la necesidad de un nuevo pacto social entre hombres y mujeres»[3]

Opinión personal

Personalmente, es un libro que me ha parecido muy interesante y su lectura es muy amena. El uso del lenguaje es claro y sencillo, en numerosas ocasiones hace uso del lenguaje coloquial y toma como recurso la ironía, por lo que ha sido un libro que también me ha hecho reír. Comparto la gran mayoría de preocupaciones sociales de la autora, por lo que me he sentido muy comprendida leyendo este libro.

Por otro lado, considero que es un libro de gran utilidad en las aulas de los institutos ya que Ana de Miguel permite comprender conceptos que a veces son muy complejos. Ojalá me hubiesen leído un libro así en la adolescencia ya que pienso firmemente que es un libro que da luz a muchos problemas sociales de desigualdad de género y la adolescencia es un periodo crucial en la configuración de la identidad personal y para que descubran valores y principios para poner en práctica una vida buena. Por lo tanto, es un libro que recomiendo leer a las personas adolescentes y adultas, tanto para mujeres, como para hombres. Ya leí en su día Ética para Amador de Fernando Savater y me gustó mucho su lectura, pero pienso que Ética para Celia ha cumplido todas mis expectativas y ha sido mucho más reconfortante y con tendencia  la ética universal. 

También es un libro con el cual también sientes rabia e indignación porque te hace ser consciente de las injusticias y la desigualdad de género. Ante todo, es un libro con fundamento y solidez teórica, con numerosas referencias teóricas y ejemplos cotidianos que son de gran utilidad para comprender los problemas que plantea y, sobre todo, es un libro con un gran componente crítico-práctico.

Cuando empecé la universidad y comencé a leer teoría feminista a manos de filósofas como Celia Amorós, Ana de Miguel, Simone de Beauvoir, entre otras, me sentí muy afortunada de haber tenido el acceso a la educación que muchas mujeres durante siglo no lo han tenido. Por eso, pienso que tenemos que leer este tipo de libros y animar a las mujeres a escribir ya que durante siglos se nos ha negado el acceso a la educación y a los libros. Como bien apunta Ana de Miguel, en las sociedades actuales siguen reproduciéndose formas de desigualdad sexista y es una tarea ética pendiente en la que todos y todas tenemos que trabajar día a día por lograr un reconocimiento ontológico universal y poder garantizar una vida buena. Por eso, es tan importante reflexionar sobre el presente, pero también es importante analizar y comprender las raíces de la desigualdad, saber de dónde venimos para orientar nuestras vidas. Como señaló en su ética el filósofo Spinoza el camino para una vida buena es conocer la verdad y no puedo estar más de acuerdo, Ana de Miguel desvela muchas verdades en este libro. Y ante estas verdades hay personas que prefieren mirar a otro lado y otras participar por el cambio. Yo elijo la segunda opción.

---

[1] Amorós, Celia y De Miguel, Ana (2010). Teoría feminista: de la Ilustración a la globalización. (Vol 1) Madrid: Minerva Ediciones, p.15

[2] De Miguel, Ana (2021). Ética para Celia. Contra la doble verdad. Barcelona: Ediciones B, p.9

[3] De Miguel, Ana (2021). Ética para Celia. Contra la doble verdad. Barcelona: Ediciones B, p.45